Hola a todos, ¿Cómo les va? Bueno, en esta oportunidad les comparto un análisis sobre el poema Ausente del poeta universal César Vallejo. Poema perteneciente en el libro de Los Heraldos negros.
Espero que les guste, y no se olviden de compartirlo con sus amigos. Comenten para saber sus opiniones al respecto.
Análisis del poema “Ausente” del poeta César Vallejo
El autor del poema Ausente, perteneciente al poemario Los Heraldos Negros, fue César Abraham Vallejo Mendoza,
poeta y narrador con tintes modernistas y vanguardistas, fue considerado
uno de los autores con una producción literaria variada y múltiple. Nació en
Santiago de Chuco el 16 de marzo de 1892 y falleció el 15 de Abril de 1938 en la
ciudad de Paris, Francia. Perteneció a una gran familia, hijo de Francisco de Paula Vallejo y María de los
Santos Mendoza, fue último de 11 hermanos. En su juventud, conoció a los literatos del modernismo
peruano como: Abraham Valdelomar, José María Eguren y José Santos Chocano,
siendo éste último su influencia del uso modernista en sus poemas. Residió en lugares
como Paris y Madrid, donde allí siguió escribiendo, sobre todo,
artículos. Entre todas sus obras, las más destacadas son: Paco Yunque, Flava Salvaje,
Trilce, Piedra negra sobre piedra blanca, España, aparta de mí este cáliz y Los
Heraldos Negros. El último de la lista es el reflejo de aquellos sentimientos que presentaba el
poeta sobre las diferentes circunstancias de su vida. Cabe decir
que, fue; probablemente, el poeta más grande del Perú y América de ese entonces.
A raíz de la muerte de su madre y
de la huida de su amada, Vallejo escribió los Heraldos Negros, un libro modernista que revela una excepción a la regla, pues se sitúa en el tránsito entre el Modernismo y las vanguardias. (2008, p. 54). Asimismo, fue el primer libro de la
producción vallejiana publicado en 1918. Consta de 7 secciones, siendo la primera
“Plafones ágiles” “con creaciones poéticas de gran carga de Modernismo. La siguiente
es “Buzos”, una sección con rasgos simbolistas” (R. González Vigil, s/f), salvo
el poema “Romería”, es un trabajo de alto nivel estético. Le sigue “De la
tierra”, parte dedicada a la lucha entre el ideal amoroso y el deseo carnal. Más tarde, nos
encontramos con “Nostalgias imperiales”, lugar del libro destinado, ya no al amor idealizado, sino al pasado
indígena también idealizado. Le sigue la sección de “Truenos”, que para R.
González Vigil, es una sección de reminiscencias bíblicas o nietzscheanas. Y por
último, una de las partes más importantes “Canciones de hogar”, donde el
poeta ya no conmemora un pasado común idealizado, sino el suyo propio.
“Ausente” se ubica en la sección
Plafones Ágiles, estructurado en 4 estrofas: dos cuartetos y dos tercetos, llamado
también soneto (muestra su apego al Modernismo); y con una medida de versos
endecasílabos de arte mayor, la cual, da una renovación a la frescura y flexibilidad. Emplea
un lenguaje apostrófico (segunda persona). Además, emplea una rima consonante
(melódica y rítmica) sin evidencias de pausa. Exhibe también repeticiones en
las palabras como: ausente, vaya, leyes y mañana. Las cuales, tienen una sucesión de
significados, pues las tres primeras representan a la muerte y la última personifica a
la vida.
Por ello, el tema principal del
poema recae en el tópico de la existencia, con objeto lírico que es el ser humano, ya
que, hace alusión al destino en donde el hombre está obligado a ir. Del mismo
modo, se lleva a cabo nefastos sentimientos como el remordimiento y el sufrimiento.
Por otro lado, el poema, al
pertenecer a la fisonomía modernista, que en aquellas épocas influenciaron en el autor,
concierne principalmente en el desarrollo de la estética, o sea, el uso de los
recursos semánticos y sintácticos que utilizó el literato para embellecer a los versos.
La primera estrofa presenta
métrica regular de 12 sílabas en cada verso con rima consonante en las palabras: vaya-
raya y Misterio- cementerio. Asimismo, presenta algunas figuras literarias del nivel
semántico como: la metáfora, la hipérbole y símil. Estas se pueden comprobar en el segundo
verso: (...) “más lejos de lo lejos, al Misterio, (...)”. Asimismo, hace empleo de
la hipérbole, la cual se define como una exageración de las palabras. Además, utiliza
un recurso de nivel morfológico que es el asíndeton. Siendo éste la supresión de las palabras con
objetivo de obtener mayor velocidad. Por último, en cuanto a la primera estrofa, hace inferir que al morir el
hombre, éste se irá a algún lugar que se desconoce. Esta idea es característica del Modernismo, pues, en esos tiempos, los autores tenían pensamientos relacionados a la muerte o al más allá.
Por otro lado, en el tercer verso
del poema se plasma los recursos restantes (metáfora y símil) al formular:
“como siguiendo inevitable raya”. Se sabe que la metáfora es el “velo” del
verdadero mensaje, o sea, que se hace uso de la deducción, no es literal. El
símil se define como una comparación, y se reluce cuando se usa “como”, por
ejemplo: eres tan bella como una paloma. A través de estos recursos, este verso nos trata de explayar
sobre el destino al que llegaremos todos algún día sin oportunidad de ser evadido: la muerte.
La segunda estrofa da un ambiente
de “estar enterrado” o difunto, que se evidencia en los versos 6 y 8 al decir: “(...)
callado imperio,” y “(...) panteón tu cautiverio". Además, el uso de las figuras
literarias como la metáfora y la adjetivación, asimismo, el símil y la imagen. La tercera
estrofa presenta al sentimiento del sufrimiento, ya que, una vez que el autor muera sufrirá y llorará por todas las heridas que ha ocasionado a las otras personas. De ahí, se recrea la cuarta estrofa, la cual nos muestra el remordimiento por haber hecho
tales acciones tan perversas, donde en sus versos se presenta un excesivo uso de la
metáfora.
En conclusión, César Vallejo nos
expone la existencia que tiene el hombre, y que, al llegar su hora, se lamenta y
se retuerce de remordimiento y dolor por todas sus acciones cometidas en el trayecto de su
vida. Caso contrario, puede ser también sentimientos como satisfacción y alegría, pues
al haber hecho muchas acciones "buenas" y estar contento con los frutos de estas, se puede descansar en paz. Por ello, sugiero que pasen a leer este magnífico poema, pues hará ponerlos a reflexionar sobre sus propias acciones y sobre dónde desearás ir, o sea,
qué sentimientos quisieran vivir en la hora de su partida (muerte), en la hora del destino.
El uso que requirió para embellecer las palabras me pareció muy
perfecto, esa influencia modernista fue extraordinaria, al igual que la sílaba métrica.
César Vallejo es, en pocas palabras, un gran poeta.
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